Sobre el permiso de formación de 20 horas para los trabajadores
Aún está por determinar el modelo a seguir. Hay un fuerte dialogo abierto entre gobierno y actores sociales (expertos, patronal, sindicatos, …).
Vemos como en conferencias, y en recientes declaraciones a los medios se ponen sobre la mesa los pros y contras de los modelos de «cheque de formación» o «cuenta individual de formación» implantados en otros países como Suecia (cuenta individual de formación), Austria (Plan de ahorro para la educación), etc.
Véase también el caso de Inglaterra (Individual Learning Account) que ha resultado un fiasco, debido a gestiones fraudulentas.
Aunque en teoría, el trabajador con al menos un años de antigüedad dispondrá de un cheque (crédito en una cuenta) para emplear en formación, lo más significativo es que el empresario podría oponerse a la elección de dichos cursos si no están relacionados con el puesto actual del trabajador.
Subyace en el fondo de la cuestión, el dotar al propio interesado de un crédito disponible para su formación («acumulables hasta 3 años»), con mayor ayudas a los menos cualificados (modelo americano «Individual Training Account»).
Se relacionará la formación realizada con la cuenta de inscripción en la Seguridad Social del trabajador, dónde se dispondrá de un historial de las competencias adquiridas a largo de la carrera profesional.
… Mientras tanto seguimos sin noticias sobre el desarrollo de la evaluación de la calidad en la formación y la implementación oficial de su ROI …
Nota: Texto incluido en la nueva reforma laboral (Real Decreto-ley 3/2012): «Disposición final tercera. Cheque formación. El Gobierno, previa consulta con los interlocutores sociales, evaluará la conveniencia de crear un cheque formación destinado a financiar el derecho individual a la formación de los trabajadores.»